La novia de Candice se cabrea un poco. Ella le sugiere que vaya a la playa para ver a los chicos y pasar un buen rato. ¡El único problema es que su caja registradora está rota! Por lo tanto, las dos putas intentarán cobrar impuestos al coche de un amigo. Planean jugarle el gran juego para hacer que se retire y también agradecerle. Primero en prepararse, la novia de Candice se encargará de su pequeño coño antes de darle la bienvenida a Christopher, su conductor. ¡Las dos chicas ya se están calentando cuando él llega y no tendrá problemas para que se abran los muslos!