| | | | | |

¡Un pequeño destornillador en el coño y el orgasmo está garantizado!



Al día siguiente de una velada bastante agitada, una chica asiática se despierta con un superdolor de cabeza pero tan emocionada como el día anterior. Decide ir a darse una ducha pero se da cuenta de que el fontanero todavía no ha venido porque no hay más agua caliente. Ella lo recuerda. Max, el fontanero, llega y no deja indiferente a la joven, que ella le hace entender y no hace falta que se lo pregunte. Se anuncia un loco juego de piernas en el aire.

Publicaciones similares

Dejar un comentario

Su dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos necesarios están marcados con *